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Vinos tintos
El vino tinto. Ese gran aliado de las buenas comidas, cenas y momentos especiales. Regalar vino es acertar siempre. Tanto si eres un apasionado del mundo del vino como si no lo eres, a nadie le amarga un buen vino tinto. Una copa de tinto, solo o en compañía siempre se disfruta. Porque disfrutar de un vino tinto, es disfrutar de nuestra tradición. Y es que el vino tinto, red wine en inglés, también conocido como vino rojo, procedente de uvas tintas, es la única obra de arte que se puede beber. Y es que si probamos un vino que nos deja huella, se nos queda su recuerdo para siempre, su aroma, su sabor, su textura, su color.
El panorama de los vinos tintos españoles es apasionante, es una herencia y tradición que continúa extendiéndose de generación en generación. Y actualmente viene cogiendo fuerza el respeto por el terruño y viticultura ecológica y sostenible.
Podemos encontrar alrededor de 10.000 variedades tintas en todo el mundo. En España se han registrado unas 235 variedades tintas, aunque se han registrado 300 variedades más en los últimos tiempos, la mayor parte de ellas desconocidas. Tempranillo, Garnacha, Syrah, Merlot, Cabernet Sauvignon, Mencía, Bobal, Maturana, entre otras son algunas de las variedades cultivadas en España.
Según su envejecimiento en barrica, distinguimos entre vino tinto joven o vino del año, vino tinto crianza o reserva o grandes reservas, dependiendo del tiempo que han estado realizando la crianza.
Los vinos tintos jóvenes son aquellos vinos que no han envejecido en barrica. Es el caso de nuestra gama HUELLA, vinos jóvenes, tintos, con gran carácter varietal, entrada en boca amable y un paso estructurado. Un vino para beber en cualquier momento. Hay quien dice que el vino a de degustarse solo, sin comida, y si te sabe bien, te gusta. El vino tinto crianza es un vino que ha envejecido en barrica, dependiendo del tiempo de crianza, van tomando diferentes menciones. Los tiempos de crianza pueden variar desde los 6 a los 12 meses en barrica. Es el caso de nuestro Vegamar Crianza, un vino con 24 meses de envejecimiento, 6 de ellos en barrica de roble americano y el resto en botella hasta alcanzar el tiempo de crianza. Para que un vino sea considerado vino tinto reserva debe haber permanecido en barrica al menos un tiempo de 12 a 24 meses, según la Denominación de Origen. Prueba nuestro Vegamar Reserva, vino de autor para apreciar ese envejecimiento tú mismo. El vino tinto gran reserva es un vino que ha envejecido en barrica un mínimo de 18 a 24 meses. Hasta aquí llegan cosechas muy excepcionales y especiales.
Los vinos tintos envejecen en barrica de roble francés o americano, aunque existen otros tipos de roble para el envejecimiento de los vinos. Las diferentes maderas, con los diferentes tostados, aportan a los vinos unas características sensoriales específicas, unidas a los aromas primarios que existen en el vino. A grandes rasgos, el roble americano aporta pocos taninos y notas de coco, cacao, café, vainilla y sabores «dulzones», respetando los aromas varietales. El roble francés cede más taninos y se destacan los frutos secos, miel, tabaco, especias y balsámicos. Sin embargo, el roble francés el algo más delicado, poros más finos, pero en mayor cantidad, transmitiendo aromas más suaves y sutiles. No es mejor un tipo de barrica u otro, dependerá del enólogo y del vino que se quiera conseguir. En Vegamar elaboramos vinos tanto en barricas de roble francés como americano dependiendo el vino que busquemos.
Estas son algunas pinceladas sobre el mundo del vino, hay una infinidad de notas relevantes acerca de los vinos. El mundo de los vinos es un mundo sin fin, un mundo apasionante en el que no dejas de aprender. Desde Vegamar, os animamos a disfrutar del placer de un buen vino, probar diferentes variedades, realizar catas de vinos y aprender de expertos en la materia de los que siempre sacar información veraz contada desde su experiencia.
